En medio de los paisajes del municipio de Alvarado, Tolima, la hacienda Arizona se erige como testigo de un fenómeno único: la materialización de Macondo, el legendario pueblo creado por Gabriel García Márquez en su obra maestra "Cien años de soledad", ahora toma forma en la realidad gracias a Netflix.

Con una extensión de aproximadamente 520 mil metros cuadrados, este enclave se transformó en el escenario perfecto para recrear la atmósfera mágica y misteriosa que caracteriza a Macondo. Bajo el inclemente sol del mediodía, el calor parece desafiar al tiempo mismo, transportando a quienes lo visitan a un rincón que, si bien no es el Caribe, evoca sus mismas sensaciones.

Cuatro versiones de Macondo han surgido de la tierra, construidas desde cero por manos colombianas que parecen tejer magia con cada ladrillo. 

"Todo está allí, intacto, como si el tiempo se hubiera detenido", comparte la diseñadora de producción, Bárbara Enríquez, quien nos guía entre las arenosas calles de Macondo. Cada calle lleva el nombre de mujeres importantes para la familia de García Márquez, rindiendo así un homenaje a su legado. Desde la Calle Margot, en honor a su hermana, hasta la Calle Papalelo, nombrada como lo llamaba Gabo a su abuelo, y la emblemática Calle de Los Turcos, rebautizada como Calle Mercedes en honor a su esposa, quien poseía ascendencia sirio-libanesa.

El arduo trabajo de construcción comenzó en noviembre de 2022, fusionando la ingeniería civil con la escenografía desde enero de 2023 hasta la actualidad. Esta combinación garantiza que Macondo no sea simplemente un conjunto de estructuras efímeras, sino una auténtica comunidad que desafía al tiempo y a la intemperie, destinada a permanecer en pie durante al menos dos años.

"Este pueblo es una síntesis perfecta entre una construcción real y una escenográfica, lo mejor de ambos mundos", concluye Enríquez, destacando la meticulosa atención al detalle que ha caracterizado cada paso de esta monumental empresa.

El legado de Gabriel García Márquez, ahora más vivo que nunca, se materializa en este rincón de Tolima, donde la magia y la realidad convergen para dar vida a uno de los universos literarios más memorables de todos los tiempos.

Con información de El Heraldo