Los normalistas del Mexe volvieron a causar caos en Pachuca, esta vez en la Central de Autobuses, donde invadieron espacios, bloquearon salidas e intentaron secuestrar autobuses para llevarlos a Francisco I. Madero. Mientras sus demandas apuntan al ámbito federal, cabe preguntarse por qué no llevan sus protestas a las oficinas de la SEP en la Ciudad de México, en lugar de afectar a los hidalguenses que ya están hartos de tanta protesta. 

Vaya tema: un incendio consumió al menos 10 autobuses de pasajeros de la empresa Lusa en una pensión del municipio de Tula de Allende. Esta es la misma empresa que actualmente opera el Tuzobús, lo que deja abiertas varias preguntas: ¿fue un accidente, un acto de inseguridad o tal vez un movimiento estratégico relacionado con el cobro de algún seguro? Las autoridades tendrán que esclarecer este hecho que, de momento, sigue rodeado de especulaciones. 

Las quejas contra la CAASIM siguen acumulándose. Además de los problemas de falta de agua, la atención lenta y tortuosa, y la ausencia de reparaciones en calles y banquetas tras sus trabajos, ahora se suma la indignación por el manejo del robo de medidores en la zona metropolitana de Pachuca. Los afectados reportan que, al acudir a solicitar reposición, la respuesta de los servidores públicos es un simple "vuelva otro día, no tenemos disponibles". Esta falta de soluciones agrava el descontento ciudadano hacia el organismo.