La inflación en México cambió de dirección en octubre, marcando un nuevo aumento en los precios al consumidor, según datos recientes del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Este jueves, el Inegi informó que el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) registró una variación mensual de 0.55% en comparación con septiembre, llevando la tasa de inflación anual a un nivel de 4.76%.

Este incremento en la inflación anualizada, que había mostrado una tendencia de desaceleración en meses anteriores, genera preocupación en torno al poder adquisitivo de los hogares y el costo de bienes y servicios. Factores como el aumento en el precio de alimentos y servicios han contribuido a este cambio de rumbo en el índice inflacionario.

Dentro de los componentes de la inflación, el rubro de alimentos, bebidas y tabaco tuvo un aumento significativo, lo cual impacta de manera directa en los bolsillos de los consumidores. Asimismo, se observó un alza en el sector de servicios, lo cual se traduce en un encarecimiento de productos básicos y servicios esenciales.

Este nuevo comportamiento de la inflación podría influir en las decisiones del Banco de México (Banxico), que ha mantenido una postura cautelosa en cuanto a la política monetaria. A medida que se aproxima el cierre de año, los analistas prevén que Banxico evalúe posibles ajustes en las tasas de interés para intentar frenar el impacto de la inflación en el mercado interno.